











El poder escribir y expresar así lo que pensamos y sentimos es uno de los mayores placeres de los que puede disfrutar un ser humano. Practicar la escritura es algo más que plasmar indefinidamente aquello que nos revolotea por la cabeza, es dejar sobre el papel, (o sobre la pared o sobre donde haga falta), una parte de nosotros para compartirla así con aquellos que puedan llegar a leerla.
Así, soñar con instrumentos que sirven para escribir, tales como lápices o plumas, significa que nos están llegando cambios que nos motivarán a salir de nuestro mundo particular y aportar nuestro granito de arena en el mundo en el que vivimos todos. Sentirás la necesidad, en este periodo, de expresar lo que llevas dentro.
Ahora bien, si en el sueño te ves escribiendo una larga carta que parece no acabar nunca y que llega a agobiarte es porque sientes gran responsabilidad ante algo que, probablemente por haberla asumido tu mismo, no encuentras la forma de quitar de tu espalda. Tanto te ves obligado a poner de ti mismo que te encuentras ya cansado de cumplir con ese papel. Si tu sueño es de verdadera angustia, y sobre todo si se repite, debes comenzar a plantearte las cosas de otra manera.
Si te ves simplemente escribiendo una carta o una nota significa te estás preparando para dar una noticia o para ser portavoz de otras personas. Si te sientes relajado, (y aun cuando te sintieras ligeramente inquieto), durante el sueño no tienes de que preocuparte, todo irá bien. Eso si, el hecho de escribir revela aquí cierta inseguridad y la necesidad de llevar un guión mejor que improvisar.
Otra cosa es que te observes escribiendo y borrando, borrando y escribiendo, sin parar. En este caso anuncia la aparición de malentendidos y desavenencias de difícil, (aunque no por ello imposible), solución. Si lo escrito aparece incompleto, sin acabar, el sueño nos avisa de que hemos de prestar mayor atención a nuestros asuntos personales pues los estamos descuidando.