Los Chaneques eran considerados dioses en la Mitología Mexicana, llamados “Ohuican Chaneque”, por la cultura Azteca, cuya traducción sería "los que habitan en lugares peligrosos", describiéndose como criaturas legendarias o seres elementales guardianes de la naturaleza, al igual que los duendes europeos pero con otras características.
Son seres míticos que forman parte de la cultura mesoamericana, los mayas de Yucatán los llamaban “aluxob” con datos que se remontan a el siglo IX, existen distintas leyendas y creencias sobre ellos, describiéndose como seres de un metro de altura, vistos por muchos como niños traviesos con cara de viejos y sus pies al revés, que juegan con los intrusos que llegan a los lugares donde ellos habitan, utilizando sus capacidades mágicas.
Una de estas capacidades es hacer que la gente se extravíe por días sin saber donde ha estado y que supuestamente fueron adoptados por ellos en ese tiempo en su mundo subterráneo donde habitan, cuya supuesta entrada es un árbol seco llamado Capoc.
Así como también se les atribuía la capacidad de apoderarse del espíritu de las personas, que solo podían recuperar a través de un ritual, algo que si no hacían podían llegar a enfermar y morir.
Se encuentran muy arraigados en la cultura Mexicana aun en la actualidad, ya que popularmente se dice que si las cosas desaparecen, fueron ellos y si uno debe internarse en el bosque debe utilizar la ropa a revés para evitar que los Chaneques se los lleven.
En lugares como Huetamo (Michoacán), Oaxaca y otros, son muy comunes las historias y la experiencias de sus habitantes hoy día con éstos seres que forman parte de su cultura y cuyo nombre se hace presente en comercios y productos, relacionándolos con la diversión generalmente.
Imagen: F.anime