Desde el comienzo de la historia del hombre se conocen objetos a los que se les han otorgado características especiales para que aporten buena suerte a sus poseedores. Estos objetos se conocen como amuletos de la suerte, y en función de su relación con el entorno se le otorgan unas capacidades u otras. Hoy vamos a hablar de uno de estos objetos: la figa, su origen, significado y amuleto de la buena suerte.
¿Qué es la figa?
El símbolo gestual figa recibe muchos nombres, también conocido como higa o mano poderosa (entre muchas otras acepciones que pueden variar en función de la zona geográfica de la que hablemos). Este símbolo es un gesto manual que cualquiera puede hacer, en el que uno introduce el dedo pulgar entre el dedo índice y corazón, de tal manera que la punta del pulgar sobresale entre ambos dedos.
Hay muchas interpretaciones de la figa, por una parte se habla de ella como un gesto defensivo y protector para ahuyentar los malos espíritus, mientras que por otra parte también se hace una interpretación de la misma indicando que puede tener que ver con un gesto obsceno, agresivo y ofensivo.
Lo mejor de todo esto es que os puede parecer nuevo pero ya en la Divina comedia de Dante aparece cómo uno de los personajes hacía la higa. Es lo glorioso de la historia que te detallamos a continuación.
Origen de la figa
Los orígenes de la figa se relacionan con Brasil, país en el que siempre ha tenido una gran importancia. Pero también con los símbolos fálicos que se representaban en el arte africano y asiático antiguo. En este tipo de representaciones se mostraba una pene en el extremo de un cilindro y lo que hoy se conoce como figa en el otro extremo.
La figa, aunque no se sabe por qué lleva ese nombre, se representa como una mano cerrada en un puño, con el pulgar asomando entre el índice y el dedo corazón. Se representa así a la fertilidad de la mujer, y es posible que el nombre tenga que ver con ello porque las higueras también se relacionan con ese aspecto.
La figa en España
Este amuleto de la suerte está especialmente presente en la historia del norte de España. Aunque se puede encontrar en cualquier punto del país, en tiendas de esoterismos, la verdad es que el fuerte de la figa está en la parte norte. Vamos a ver cómo es su presencia en diferentes comunidades autónomas:
- Catillas y León: La ficha de azabache se utilizaba tradicionalmente como aumelo contra la brujería. Se eligió este objeto por las dos cualidades importantes que posee, por un lado las caraterísticas propias de la figa y por otro lado el material con el que se hacía. Ese material, el azabache, siempre se ha relacionado con propiedades curativas gracias a su extracción del mineral de carbono. En relación a este uso de los orígenes más tarde se empezó a utilizar como un protectos del mal de ojo y de las enfermedades, por eso se colocaba en torno a las camas y las puertas, lugares donde se necesita mayor protección.
- Cataluña: Además de utilizarse como amuleto de la buena suerte y protección del mal de ojo también ha cumplido un improtante papel en los rezos y oraciones de aquellos que creían en este tipo de supersticiones. Se utilizaba especialmente en la protección de niños y niñas, quienes necesitan más ayuda que los adultos.
- Asturias: Igual que en Castilla y León se utilizaba la figa de azabache. Seguramente esto se deba a que la mayor influencia de la figa en Castilla y León se daba precisamente en la provincia de León. Esta linda con Asturias y ambas comparten mucha tradición e historia. por lo tanto es normal que muchos amuletos se hayan conocido en el mismo ámbito en ambas comunidades. En Asturias, debido al uso del bable, la figa también se conoce con otros nombres como cigua o puñerín.
- Galicia: Esta es la zona de España donde más importancia ha tenido la figa a lo largo de la historia, y sigue siendo así a día de hoy. Se utiliza este amuleto de manera personal, llevándolo colgado entre los ropajes desde bebés hasta ancianos. Además, cuando el gesto de la figa se hace con la mano se está despreciando algo, ya sea un acto o la presencia del mal.
Significado de la figa
La figa se empezó a hacer (y no a portar) como símbolo que protegía de los malos augurios y de las fuerzas del mal. Más tarde comenzó a utilizarse como representación artística en los objetos africanos y asiáticos que ya hemos comentado. Y poco a poco la figa como gesto y la figa como amuleto empezaron a confundirse sin quedar claras las características de cada una.
Finalmente se ha ido definiendo de nuevo esa diferencia. Y aunque en cada país se utiliza de una manera (portada o gesticulizada) el significado es el mismo en cualquier parte. La figa como amuleto es la que está directamente relacionada con la buena suerte y la figa como gesto es una protección y un gesto negativo hacia algo externo.
La figa como amuleto de la suerte
Las propiedades de la figa como amuleto son muchas. Vamos a ver cuáles son y luego profundizaremos en el aspecto relacionado con la buena suerte. Sus propiedades son:
- Es capaz de mejorar la fertilidad: Esto se debe a su relación con la higuera y con las representaciones fálicas. Es un amuleto muy relacionado con la fertilidad de la mujer especialmente.
- Evita el mal de ojo: Este punto está muy relacionado con su historia dentro de España. En todas las comunidades norteñas en las que ha tenido relevancia hay mucha tradición relacionada con las brujas. Por ello siempre fue muy importante protegerse del mal de ojo, y la figa fue uno de los amuletos que mejores resultados dió al respecto.
- Evita la envidia: Protege de las malas vibraciones y purifica el espíritu lo que hace que el portador se libre de la envidia.
- Es capaz de atraer dinero: Esto se consigue llevando el amuleto dentro de la cartera o situándolo al lado de una hucha.
La relación de la figa con la buena suerte se debe a su capacidad de mejorar la fertilidad. Este aspecto no se refiere sólo a la fertilidad física, sino a la capacidad de desarrollar buenos negocios y oportunidades, y a que los proyectos salgan adelante de la mejor manera posible. Por ello, la figa se relaciona con la buena suerte o al menos con la suerte para que las cosas salgan bien.