El Yeti: historia del origen y leyenda del «Abominable hombre de las nieves»

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La historia de un gigantesco hombre de las nieves han fascinado al mundo durante generaciones pero ¿estamos ante una realidad o es solo una leyenda? Descubramos ahora más sobre esta criatura y no te pierdas nada de lo que te contamos sobre El Yeti: historia del origen y leyenda del «Abominable hombre de las nieves» .

El Yeti: historia del origen y leyenda del «Abominable hombre de las nieves»

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Durante décadas se han escuchado y leído historias que tienen que ver con un gigante que por lo visto vaga por las montañas del Himalaya, pero ¿de dónde surge su historia? y ¿es esta real o es solo una leyenda? Lo cierto es que el gigante, al que se conoce como el Yeti, se ha acabado convirtiendo en una especie de personaje perteneciente a la cultura popular y de hecho han habido referencias a este en montones de series y películas, de modo que muchos hemos interpretado que su existencia no es real, aunque se podría contar la historia de su origen y con ello pensar que quizás en el pasado sí que existió realmente.

Quién es el Yeti

En la cultura popular, el  Yeti es un hombre-mono enorme y peludo con pies enormes y dientes agresivos similares a los de un sable. Su pelaje es gris o blanco. A menudo se representa recorriendo solo por  las montañas nevadas, en una imagen que representa un regreso salvaje a nuestro violento pasado evolutivo.

¿Hay algo en esta figura mítica, más allá de los cuentos y las leyendas contadas? En los últimos años, la genética moderna se ha aplicado en estudiar el misterio del Yeti de modo que se cree que por fin se ha obtenido una respuesta sobre este gigante de las nieves del que no se tienen ninguna prueba fehaciente de que existiera.

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El origen del Yeti

El Yeti es supuestamente  uno de entre los muchos «hombres-mono» que se han conocido a lo largo de la historia. En otras partes del mundo, se habla de gigantes similares, como Bigfoot o Sasquatch, de manera que puede que su existencia no sea real para nada y que su historia haya sido modificado dando pie a que se conozca de distintas maneras en función de donde se escucha.

La figura del Yeti tiene sus orígenes en el folclore. El personaje forma parte de una antigua e importante leyendo dentro de la historia de los sherpas, las comunidades que viven a una altitud promedio de 12,000 pies en el este de Nepal.

Fue el autor Shiva Dhakal quien recopiló 12 historias tradicionales en su libro Folk Tales of Sherpa and Yeti, y en ellas aparecía un temible gigante de las nieves que era además la mayor amenaza en cada historia.

Por ejemplo, una de las historias llamada «La Aniquilación del Yeti» trata sobre como los Sherpas  buscan vengarse de un grupo atormentador de Yetis. Hacen alarde de beber alcohol y luchar para alentar a los yetis a seguir el ejemplo y destruirse mutuamente. En cambio, los yetis supervivientes declaran venganza y ascienden a las montañas para continuar con sus depredaciones.

En otra historia, una niña local es violada por un Yeti y pierde su salud poco después. En otra, el Yeti crece más y más a medida que sale el sol y el humano que lo ve pierde conciencia y energía.

Todas estas historias crearon la leyenda del que hoy conocemos como Yeti, el «Abominable hombre de las Nieves», pero en su origen el libro no tenía intención de convertir al gigante en un personaje popular, sino que en realidad era utilizado para advertir a los sherpas con las historias que contenía, que no debían acercarse a los animales salvajes, o para que los niños tomaran conciencia de los peligros en las montaña y no se alejaran de la comunidad.

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La leyenda del Yeti y su evolución

El Himalaya ha sido siempre una de las montañas más visitadas por alpinistas occidentales de modo que fueron estos los que comenzaron a escuchar las historias del Yeti por parte de los sherpas.

Estas historias además, eran contadas para que los alpinistas tuvieran fuerza frente a los temporales, pero poco a poco fue evolucionando como una historia que tenía que ver con un gigante terrorífico que asustaba a todos. De este modo, lo que en realidad era un símbolo de fuerza o uno para advertir de peligros, se acabó convirtiendo en un monstruo temible.

El origen de la leyenda del Yeti para Occidente

Además de lo explicado existe un momento en la historia en la que el Yeti parece «cobrar vida» o hacerse real. Me refiero a como en 1921, el explorador y político Charles Howard-Bury dirigió una expedición británica al Monte Everest. Este encontró algunas grandes huellas y se le dijo que pertenecían a «metoh-kangmi», cuyo significado era similar al de «hombre-oso hombre de nieve».

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Cuando la expedición regresó, un periodista entrevistó a algunos de los miembros. Desafortunadamente, Henry Newman no era el periodista más preciso. Primero malinterpretó «metoh» como «sucio», y luego decidió que «abominable» era aún mejor.

Nació entonces la leyenda del «abominable hombre de las nieves» o Yeti y se le sumaron las historias de los avistamientos por parte de los lugareños y que seguían siendo traducidas por los visitantes occidentales. Fue así entonces como la historia de un hombre de nieve gigante y misterioso que se parecía a un mono acabó despegando.

En la década de 1950, fue cuando el interés por el Yeti llegó a ser realmente elevado, de hecho incluso varios alpinistas viajaron hasta el Himalaya para formar parte de diversas expediciones que se lanzaron para poder encontrar al monstruo. Dichas expediciones sin embargo no dieron resultado alguno aunque existe una propia leyenda dentro de ellas y es que el famoso actor de Hollywood, James Stewart, formó parte de una de ellas y se dice que encontró un dedo del Yeti que siempre llevaba en una maleta. Años más tarde, en 2011, unos científicos acabaron por descubrir mediante un análisis del dedo que este en realidad, era humano.

En la actualidad el Yeti no es más que leyenda, dado que ya no se habla de él como un personaje real, aunque las nuevas tecnologías (con los vídeos de avistamientos que encontramos en YouTube por ejemplo) han  provocado eso sí, que la leyenda crezca y que siga estando vigente.

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